¡Despegue hacia la Luna!

Dos módulos lunares, uno estadounidense y otro japonés, viajan en un mismo cohete a la Luna; si todo sale bien, en la superficie realizarán pruebas científicas y tecnológicas que ayuden a preparar futuras misiones humanas.

Lanzamiento del Falcon 9 con los módulos lunares Blue Ghost M1 y Hakuto-R M2 Resilience. Imagen: SpaceX.

Dos módulos robóticos privados, uno estadounidense y otro japonés, van camino a la Luna con la misión de recabar información de la superficie del satélite que sirva a futuras misiones.

A bordo del cohete Falcon 9, de SpaceX, van el módulo Blue Ghost 1, de la NASA, y el módulo Hakuto-R Resilience, de Japón.

Blue Ghost, de la compañía Firefly Aerospace, que forma parte del programa Servicios de Carga Lunar Comercial (CLPS, por sus siglas en inglés) de la NASA, lleva 10 instrumentos científicos y tecnológicos con los que se busca comprender mejor a nuestro vecino celestial, estudiar su entorno y hacer pruebas que ayuden a los futuros astronautas de la misión Artemis en su preparación para alunizar de manera segura.

“Aprendimos muchas lecciones durante la era Apolo que sirvieron de base para la Misión Blue Ghost 1 de Firefly, lo que garantiza la seguridad y la salud de nuestros futuros instrumentos científicos, naves espaciales y, lo más importante, de nuestros astronautas en la superficie lunar, afirmó Nicola Fox, administradora asociada de la Dirección de Misiones Científicas de la sede de la NASA en Washington.

Los instrumentos analizarán el flujo de calor del interior de la Luna, recolectarán muestras de regolito de la superficie lunar, medirán con precisión la distancia entre la Tierra y la Luna, así como los campos eléctricos y magnéticos del manto lunar.

Recreación del Blue Ghost M1 en la superficie lunar. Imagen: Firefly.

Otra de las tareas de estos instrumentos será analizar su propia capacidad para repeler o desprender el polvo lunar. Los datos que capturen permitirán a la industria probar, mejorar y proteger las naves espaciales, los trajes espaciales y los hábitats del regolito abrasivo.

Una cámara estéreo tomará imágenes de alta resolución que ayudarán a crear modelos para predecir la erosión del regolito lunar.

Blue Ghost tardará 45 días en llegar a la superficie lunar. Su alunizaje está previsto en el Mare Crisium (Mar de las Crisis) a principios de marzo. Si todo marcha con éxito, la misión estará trabajando 14 días en sus pruebas científicas.

Módulo lunar Hakuto-R Resilience con el rover Tenacious en la parte superior. Imagen Ispace.

SEGUNDO INTENTO NIPÓN

En el módulo Resilience, fabricado por la empresa japonesa Ispace, viaja el diminuto róver Tenacious que recolectará muestras de polvo lunar para, posteriormente, compartirlas con la agencia espacial estadounidense.

Resilience es el segundo intento nipón por llegar a la superficie lunar, después del fracaso del Hakuto-R, que se estrelló en la Luna en abril de 2023. Se dirige al Mare Frigoris (Mar de Frío), en el hemisferio norte del satélite, pero tardará casi cuatro veces más que el Blue Ghost en completar su viaje.

Fuente: NASA | El País | SpaceX | Ispace

Compartir:

Facebook
Twitter
Pinterest
LinkedIn
Planetario de Jalisco

Otras noticias